Ficha de Saito

Kimura

Homosexual

Príncipe

Es un chico alto, mide unos 1, 85 metros. Su cabello castaño oscuro, sedoso y algo alborotado, tal vez se deba a que no se molesta demasiado en peinarlo, contrasta con su pálida piel, la que se broncea demasiado rápido en el sol.
No viste de un modo en particular, es la típica persona que dice "me he puesto lo primero que he encontrado en el placard", y no miente, la mayoría de las veces es así, no repara mucho en su vestimenta pues no le importa cómo lo vean los demás, mientras se sienta cómodo está bien.
Tal vez lo que más destaca de su físico son sus ojos bicolor, no es que le haya sucedido algo o utilice lentes de contacto para verse más "interesante", él ya nació así, se cree que es debido a la sangre materna, pues era una vampiresa, y su padre un demonio, dicen que es esa mezcla de sangre la causante de que uno de sus ojos sea de un verde brilloso y el otro de un rojo sangre. Pero eso no lo acompleja en lo más mínimo.

No es alguien que sea muy sociable, es bastante serio, frío y solitario por naturaleza, no evita a los demás, pero tampoco los busca, es de los que deja que los otros vayan a él. Pero, no es su culpa el sentirse más cómodo en soledad y silencio, pues es a lo que está acostumbrado, en su infancia siempre estuvo encerrado en el castillo, no se le permitía salir a relacionarse con otros niños con el argumento de que sólo se intentaba protegerlo, así que Sai aprendió a entretenerse solo, molestando a los sirvientes y correteando por el lugar, destrozándolo todo y culpando a alguien más... bueno, nunca se dijo que fuese un ángel, ni siquiera pretendía serlo, era un niño malcriado que disfrutaba con el sufrimiento ajeno, el ver a los sirvientes ser castigados por sus propias travesuras era su pan de cada día. Hasta que un día llegó un nuevo sirviente, era algo normal, pues los castigados si no terminaban muertos, estaban demasiado mal heridos como para continuar trabajando y su padre los ejecutaba ante los ojos del niño que reía entretenido con el espectáculo de lágrimas y sangre; pero este nuevo sirviente tenía algo que los otros no... un hijo de su edad, un niño al que su padre le había revuelto los cabellos con mucho cariño en cuanto lo vio, esa fue la primera vez que Saitou sintió celos, no quería que su padre consintiera a alguien más, por eso, en cuanto tuvo oportunidad llevó a cabo la peor travesura de todas: destrozó el cuarto "especial" de su padre, una habitación en la que tenía sus tesoros más preciados, por supuesto, que luego culpó al hijo del sirviente, al que su padre encolerizado casi mata a golpes. Esto asustó mucho a Saitou que se vio obligado a interferir, recibiendo un poco de la golpiza también, pero eso no le importó al ver al niño inconsciente. Desde ese día cambió, ya no era tan cruel con el niño, se había vuelto sobreprotector y posesivo, hasta le sonreía. Ese niño, hasta ahora, es la única persona con la que se lleva bien y que saca lo mejor de él.
Con el resto del mundo sigue comportándose de manera egoísta y caprichosa, para él todo debe hacerse como desea o habrá consecuencias.

Saitou nació en una familia noble, vivió toda su vida en el Reclusorio Sores. Como primogénito fue muy mimado y malcriado, pero aún así, su padre siempre andaba metido en sus cosas y poca atención le prestaba, por eso el niño buscó otras maneras de hacerse notar; destrozar cosas, volverse rebelde, corretear por ahí sacando todo de lugar, causar problemas en la escuela... cualquier excusa era válida para que sus padres lo notaran. Por supuesto que era tan mimado que jamás lo culpaban, será por eso que su comportamiento errático continuaba y cada vez empeoraba más, hasta llegar a causarle heridas graves a compañeros del colegio, eso le valió una expulsión que usó a su favor llorándole a sus padres y diciéndole que los profesores y sus compañeros eran malvados con él, ellos, que lo malcriaban tanto, aún sabiendo que no era así, decidieron que lo mejor para el pequeño, que en ese entonces tenía al rededor de seis años, era aprender en casa. Claro que esto no cambió en nada la actitud del niño, sólo lo hizo comprender que sus padres harían cualquier cosa que les pidiera y eso alimentó su rebeldía. Hasta que un sirviente nuevo llegó con cierto niño que le cambiaría la vida, y con ella su actitud, ambos habían llegado a formar una amistad inquebrantable, pero un día, su amigo desapareció, no era de extrañar, ya no eran niños y de seguro quería vivir aventuras nuevas, pero se sintió traicionado, que desapareciera sin decir palabra, sin darle un motivo, lo enfadó demasiado y regresó a la actitud fría y despreocupada, volviendo a causar estragos y torturando a la primer persona que tenía cerca: su hermano menor, después de todo, no hacía muchos años que su padre tuvieron un segundo hijo, siempre había sido indiferente con respecto a su existencia, pero la repentina desaparición de su amigo lo hizo fijarse en él y usarlo de juguete.
Hoy en día su padre está muy enfermo y él se encuentra próximo a asumir el trono, pero no es lo que desea, las responsabilidades no son lo suyo, por eso suele pasar días lejos de casa, causando problemas por ahí, esperando volver a encontrar a su amigo y cobrarse el que lo haya abandonado de semejante modo.

Como demonio tiene ciertos poderes que no suele usar demasiado: